Hoy las fotos no hacen honores a estos panecillos, y es que están tannnn buenos, que no te conformarás con comer solamente uno. Puede ser que con estos calores no te apetezca mucho ponerte a amasar, pero si te digo que no llevan ni gota de mantequilla y que no les tienen nada que envidiar a unos bollos suizos en cuanto a esponjosidad ¿qué me dices? te animas a ponerte manos a la obra ¿o no?

Ingredientes:
350 g de zanahoria cocida (la preparo en el microondas)
2 cucharadas de miel
200 g de leche
150 g de azúcar
850 g de harina
25 g de levadura prensada (de panadero)
50 g de aceite
Un pizco de sal
Para decorar: azúcar glas

Preparación
Deshacemos la levadura en la leche a temperatura ambiente.
En un bol ponemos la zanahoria cocida y triturada, la miel, la sal, el aceite, el azúcar y la mezcla de leche/ levadura.
Vamos añadiendo la harina de a pocos removiendo (puedes hacerlo con la mano o con una cuchara, tu mism@)
Cuando nos cueste remover, volcamos en la superficie de trabajo y continuamos el proceso.
Puede ser que no necesites toda la harina o que necesites una poca más, depende del tipo de harina, en mi caso he utilizado harina común de supermercado.
Amasamos hasta obtener una masa lisa y elástica ( lo podemos hacer utilizando el proceso de amasado/ reposo) o en amasadora.
Dejamos fermentar hasta que doble de volumen.

Desgasificamos y formamos unas bolitas (las he preparado de unos 40 g)
Dejamos levar de nuevo hasta que doblen de tamaño e introducimos en el horno a 180º hasta que estén doradas (unos 18 minutos)
Dejamos enfriar , espolvoreamos con azúcar glas y a disfrutar como posesos.